El Teatre Lliure de Barcelona estrena ‘La malaltia’, un docudrama escénico basado en ‘El mal de la juventud’ de Ferdinand Bruckner que dirige Juan Carlos Martel y que podrá verse del 5 de marzo al 11 de abril en Montjuïc. En escena, seis intérpretes de entre 20 y 30 años hablan de un sistema que les ahoga e intentar dar respuesta a la pregunta «¿qué significa ser joven?».
‘La malaltia’ es la primera dirección que firma Martel Bayod desde que entró a dirigir el Teatre Lliure, y tenía muy claro que quería hacerlo dando voz a los jóvenes. «Si no empezamos a darles lugar y presencia, vemos como la gente menor de 30 años empieza –si no lo es ya– a ser incapaz de imaginar alternativas al sistema capitalista. Y en cambio, son ellas las que tendrían que marcar el camino», ha declarado.
Con la complicidad de Íngrid Guardiola como dramaturgista, han querido poner en diálogo a la juventud desencantada de la Europa de entreguerras de los años 20 con nuevas escenas que permiten reflexionar de una manera más profunda sobre temas fundamentales de ‘El mal de la juventud’, como son el suicidio, la depresión, qué significa ser joven y qué pasa cuando nos hacemos mayores y entramos en la vida adulta. «Teníamos ganas de hablar de figuras como Jordi Mesalles, Mark Fisher, Clarice Lispector… Nos ayudaban a romper el silenciamiento hacia el suicidio a través de la cultura», ha contado Guardiola.
Abordar el tema del suicidio desde la visión de dejar de sufrir, y no de dejar de vivir, ha sido uno de los retos del montaje. «Hemos intentado trasladar al escenario qué momentos de la vida te hacen sufrir tanto como para tomar la decisión de dejar de vivir», ha apuntado Martel Bayod, a la vez que ha planteado si la juventud es una enfermedad o bien lo es el propio sistema.
En este sentido, otra de las temáticas que aborda ‘La malaltia’ gira en torno al concepto de la juventud y de hasta qué punto va asociado con un orden productivo. «Ser joven no es una etapa biológica de nuestra vida que tenemos que descartar una vez ya queremos aburguesarnos. Queremos definir la juventud como el desencajar, el no asumir todo lo que nos viene dado a ciegas, el poder decir basta a lo que no nos va bien», ha contado Guardiola.
‘La malaltia’ está protagonizada por seis actores y actrices de entre 20 y 30 años. Guillem Balart, Elena Martín y cuatro intérpretes más seleccionados en un cásting abierto al que se presentaron más de 750 personas: Emma Arquillué, Francesc Marginet Sensada, Martina Roura y Mariantònia Salas. Todos ellos conforman un grupo de estudiantes de medicina del 2021 que grabarán en directo su disconformidad recreando las escenas de Bruckner y otros materiales contemporáneos.
Para llevar la acción a la actualidad, también se ha convertido el personaje de Désirée -Elena Martín- en una videomaker que se expresa a través de cápsulas audiovisuales. En colaboración con los alumnos del Máster en Documental de Creación de la UPF, se ha documentado y grabado el conjunto de cápsulas que el personaje de Désirée ha creado a lo largo de su vida.
Entre otros temas, se habla en ellas sobre la violencia de los castings, a partir de la grabación de la audición que se hizo en el Lliure; la precarización laboral del trabajo doméstico y el dolor que provoca en el cuerpo, con el testimonio de una trabajadora del colectivo Las Kellys; la experiencia de un grupo de jóvenes médicos que vivieron la primera oleada de la COVID; la prostitución, a partir de la visión de una mujer del colectivo Genera; y el suicidio. Estas cápsulas estarán disponibles para ser visionadas como material adicional del espectáculo en el Lliure online. La última cápsula se grabará en directo en cada función.
‘La malaltia’ podrá verse del 5 de marzo al 11 de abril en la Sala Fabià Puigserver de Montjuic. «Los jóvenes evidentemente tienen que venir al teatro pero a todo el mundo le pueden resonar cosas que pueda ver en esta pieza», ha concluido Martel Bayod. A partir del 1 de abril, estará disponible en el Lliure online.
Junto con ‘Sis personatges, homenatge a Tomás Giner’ y ‘Càsting Giulietta’, ‘La malaltia’ cierra una trilogía de montajes escénicos y sociales con la que Juan Carlos Martel Bayod ha querido poner el foco en aspectos hasta ahora poco visibles en escena como las personas sin techo, la soledad de la gente mayor, el edatismo, la prostitución o el suicidio.
