La nueva temporada del Teatro de La Abadía será «la más femenina» de sus 30 años de historia
El teatro madrileño anuncia cuatro producciones propias y varias colaboraciones
Cuando aún le quedan algunas semanas a la actual temporada para poner el broche final, con más de 77.000 espectadores hasta el momento, el Teatro de La Abadía ha presentado ya su programación 2024-25. Un curso escénico en el que el teatro cumplirá 30 años desde que levantara el telón en febrero de 1995 para estrenar ‘Retablo de la avaricia, la lujuria y la muerte‘ de Ramón María del Valle-Inclán dirigido por su fundador José Luis Gómez. Con la actual dirección artística de Juan Mayorga, el centro escénico del madrileño barrio de Chamberí continúa con el mismo espíritu para el que fue fundado: generar un lugar para encontrarse con el objetivo de incidir en la sociedad desde las artes escénicas.
Según los datos proporcionados por Mayorga, la Abadía ha tenido esta temporada más de un 82% de ocupación media, diez espectáculos en gira con más de 35.000 espectadores, los ciclos han logrado más de 2.300 espectadores y las exposiciones, experiencias, cursos y talleres y de mediación artística de La Abadía cruza la calle han tenido gran poder de convocatoria. «Nuestro teatro va a cumplir 30 años en esta temporada 2024-25, la más femenina de nuestra historia, ya que habrá 14 directoras y 9 directores, 14 dramaturgas y 17 dramaturgos, con mucha representación femenina en los equipos. La Abadía es un teatro del barrio, de Madrid y del Estado que mira hacia toda España, Europa y América», señala el director artístico.
La Abadía incluye en esta temporada 2024-25 cuatro producciones propias. ‘Los yugoslavos‘ de Juan Mayorga con Javier Gutiérrez; la adaptación al teatro de la novela ‘Caperucita en Manhattan‘ de Carmen Martín Gaite por Lucía Miranda, con Mamen García, en el centenario del nacimiento de la escritora; ‘Viejos tiempos‘ de Harold Pinter y la dirección de Beatriz Argüello, en el que participará Ernesto Alterio; y ‘Un sublime error‘, dirigido por Jan Lauwers de Needcompany. Además, participa en el proyecto ‘Interphono‘ realizado junto a Nonumoï (Gennevilliers/París) y La Tricoterie (Bruselas), con el apoyo del programa Europa Creativa.
Una programación literaria
La programación escénica contará con títulos en torno a tres escritores y pensadores imprescindibles de habla hispana para la literatura universal, los cuales tendrán sendos homenajes en forma de espectáculos teatrales. Los argentinos Borges y Cortázar y el mexicano Juan Rulfo son inspiración en ‘Borges y yo. Recuerdos de un amigo futuro‘, una producción creada para la actriz alemana Hanna Schygulla, musa de Fassbinder, que dirige esta versión protagonizada por la argentina Andrea Bonelli; José Sanchis Sinisterra y Clara Sanchis proponen llevar a escena ‘Cortázar en juego‘, bajo la dirección de Natalia Menéndez y con Pablo Rivero y la propia Sanchis en escena; Por último, la literatura hispana termina en diciembre con ‘Natalia‘, un espectáculo de títeres de la compañía La Chana, basado en el relato Talpa de Juan Rulfo.
Igualmente, literatura y mujer se dan la mano en la nueva propuesta de Paula Paz, quien ya presentó en La Abadía ‘Cartas vivas‘ sobre la correspondencia entre Carmen Laforet y Elena Fortún. En esta ocasión, la directora regresa a La Abadía con ‘El sillón K‘, una propuesta epistolar, un poema a dos voces dedicada a dos grandes mujeres: Carmen Conde y Katherine Mansfield. Además de la producción propia ‘Caperucita en Manhattan‘, en el centenario del nacimiento de Carmen Martín Gaite llega a La Abadía otro título de la escritora con ‘El cuarto de atrás‘, de Rakel Camacho con Emma Suárez, que vuelve a los escenarios después de diez años dedicada al cine. Por último, la literatura cobra protagonismo en ‘El mundo está roto pero se puede caminar’ de Harkaitz Cano, sobre la historia de una niña que se reconcilia con su padre a través de los libros.
Una temporada abierta a nuevas generaciones
El Teatro de La Abadía ha querido siempre, desde su fundación, mostrar en su programación el trabajo de maestros de la escena nacional e internacional al tiempo que daba espacios a valores en alza del teatro español. En este sentido y en esta ocasión, directores como Ernesto Caballero (‘Orestíada‘), Xabier Albertí (‘El maestro Juan Martínez que estaba allí’) o el propio Mayorga (‘Los yugoslavos‘), compartirán los escenarios con creadoras y creadores en alza: Carla Nyman, que llega con ‘Hysteria‘, de Teatro Kamikaze, Emma Arquillué con ‘A fuego‘, una producción de La Bella Otero, con Pablo Macho Otero, Oriol Pla Solina con ‘Travy‘ y Luz Arcas con su tríptico compuesto por ‘Toná’, ‘Trilla‘ y ‘Mariana’, que se podrá ver en tres días sucesivos en el Ciclo de los milagros.
Anna Serrano Gatell llega con una pieza de la dramaturga británica Molly Taylor, ‘Cacophony’, que ha llenado las salas de la generación Z en la sala Beckett para hablar de la cultura de la cancelación en las redes sociales. El otro título que mira a nuestra realidad más inmediata es ‘El dilema del corcho’, con un texto de Patxo Tellería, quien también interpreta la función junto a Ramón Barea, bajo la dirección de Mireia Gabilondo.
Proyectos internacionales
Dos son los proyectos internacionales en los que participa el Teatro de La Abadía. El primero de ellos, ‘Un sublime error‘, un monólogo interpretado por Gonzalo Cunill creado ex profeso para él por Jan Lauwers, fundador y director de la compañía belga Needcompany. El segundo se trata del proyecto ‘Interphono’ en el que tres teatros europeos, el propio La Abadía, Nonumoï (Gennevilliers/París) y La Tricoterie (Bruselas), trabajarán en talleres creativos con los colectivos vecinales de tres barrios en sus respectivos países. Cada teatro generará su propio espectáculo para hablar de soledad, convivencia y las nuevas relaciones humanas. El Teatro de La Abadía ha contado con la complicidad de la joven compañía drift (el colectivo que realizó recientemente la pieza experiencial Santa Eugenia) para llevar a cabo este proyecto que lleva por título ‘Ya no queda nada de todo esto’.
Habrá también ciclos y centro de estudios. El Faro de La Abadía abrirá su espacio para el pensamiento a nombres como Cristina Oñoro, Reyes Mate o Estrella de Diego. Por su parte, el ciclo Poetas en La Abadía contará con autores y autoras relevantes como Luz Pichel, Fernando Beltrán y Mario Obrero. Igualmente, Cómicoas en La Abadía reunirá de nuevo en el escenario a una pareja de actores y actrices para hablar del oficio, al tiempo que El Absidiolo se abre a nuevas exposiciones. En última instancia, La Abadía amplía su formación con nuevos cursos y talleres y continúa su importante labor en el proyecto de mediación social y artística La Abadía cruza la calle, que tuvo ayer también su momento más simpático con la intervención de dos alumnos, Yassine y Ariadna, con Juan Mayorga sobre el escenario.
La temporada 2024-25 contará igualmente con el ciclo Teatro bajo la arena, inaugurado durante la presente temporada que busca ir más allá de los muros de La Abadía para encontrarse con nuevas compañías emergentes o veteranas con lenguajes singulares y miradas renovadas. Como colofón a la presentación, la coreógrafa, bailarina y directora Luz Arcas intervino para mostrar ante los y las presentes un fragmento de ‘Trilla‘.