Autora: Emmanuelle Granier
Afirmar, ya se trate de contextos sociales, políticos o artísticos, que las mujeres occidentales del llamado período «moderno» apenas tuvieron espacio en el concierto de las voces masculinas no es sino un truismo. La actividad literaria y el mundo del espectáculo no escaparon a esta verdad: en dichos contextos, como en otros muchos, lo masculino dominante producía las condiciones para su propia conservación y mantenía lo femenino en la marginalidad por todos los medios posibles. En España, las antologías del teatro moderno sólo reflejan una proporción muy reducida de textos escritos por mujeres. Entre los motivos alegados por los historiadores para explicar tal silencio por parte de las mujeres españolas en el repertorio dramático moderno, figuran –además de la autoprotección del poder masculino dominante– la ausencia de genealogía femenina, y por lo tanto de modelos que seguir, así como la influencia de factores sociológicos tales como el peso de la moral burguesa y el analfabetismo imperante en la población femenina marginalizada en aquel momento. En la línea de ese tipo de trabajos basados en la discriminación positiva con el fin de rehabilitar la escritura dramática de mujeres, se explora en este libro la producción de las dramaturgas españolas a caballo entre los siglos XX y XXI, con el objetivo de analizar sus orientaciones temáticas, estéticas y filosóficas.