Los principales festivales de teatro clásico defienden en Peñíscola su papel como motor cultural y económico
El I Encuentro Nacional de Festivales de Teatro Clásico, que entre el 16 y el 18 de mayo ha reunido en Peñíscola a cinco de los principales certámenes de esta disciplina en el Estado español, ha llegado esta mañana a su final con una reivindicación sobre la mesa: la de defender el papel que juegan estas muestras teatrales como motor económico y de consolidación del turismo cultural.
El foro de reflexión surgido de estas tres jornadas de debate ha servido además como punto de partida para fijar una estrategia conjunta a medio plazo que permita a estos festivales ampliar sus canales de comunicación y cooperación y diseñar posibles proyectos de coproducción y colaboración en materia de giras de compañías internacionales y consolidación de públicos. En este sentido, han acordado convocar un próximo encuentro a finales de año para hacer balance de las propuestas y establecer nuevos objetivos.
En este I Encuentro Nacional de Festivales de Teatro Clásico han participado técnicos y directores del Festival de Niebla (Huelva), el de Olmedo Clásico (Valladolid), el Festival de Almagro (Ciudad Real); el de Olite (Navarra) y el Festival de Teatro Clásico Castillo de Peñíscola, organizador de este foro a través de la Diputación de Castellón.
Los asistentes han expuesto durante las sesiones las realidades y particularidades de cada uno de los festivales, así como las problemáticas e inquietudes que, desde su singularidad, comparten, con el objetivo de buscar soluciones conjuntas tendentes principalmente a «mantener nuestro público, a atraer nuevos espectadores y a seguir consolidando el papel de estos festivales como motor económico y cultural, como dinamizadores de las ciudades y los espacios que los acogen», han explicado.
«Sobre todo, este encuentro ha servido para acercar posturas, para conocernos un poco mejor y aportar ideas que nos beneficien a todos», ha señalado por su parte el director del Festival de Teatro Clásico de Peñíscola, Carles Benlliure, quien ha resaltado que estos certámenes teatrales «salen reforzados» de este encuentro.
«Somos conscientes de que son un motor económico y un motor cultural, no sólo de exhibición sino también de producción artística de las compañías; han dado visibilidad a ciudades pequeñas, situándolas en el mapa del turismo cultural, y han sacado los núcleos de la cultura de las grandes ciudades poniendo en valor el patrimonio histórico del país», han señalado los participantes.
«La inversión en teatro es una inversión rentable, y queremos que esto se vea», puntualizan.
Además de las reuniones, la cita ha incluido una visita al castillo del Papa Luna para mostrar los condicionantes técnicos del escenario del Festival de Teatro Clásico de Peñíscola, que celebrará el próximo mes de julio su decimonovena edición.
A finales de este 2016, los técnicos y directores de estos cinco certámenes de teatro clásico retomarán el calendario de reuniones para seguir avanzando en ese discurso común, para seguir acercando posturas y generando puntos de apoyo entre estos festivales «que evidencian que este país, con todas sus diferencias, tiene una cultura potente, un Siglo de Oro maravilloso», concluyen.