Los Premios Max de las Artes Escénicas, convocados por la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE), conocerán mañana -14 de febrero a las 12.30- el nombre de sus finalistas en las 24 categorías a concurso. Los Max, que este año alcanzan ya su quinta edición, se han consolidado como el mayor reconocimiento para los profesionales de teatro y danza del país, dado que son sus propios compañeros quienes integran el cuerpo electoral. Más de 14.000 personas tienen derecho a voto en esta edición, que vivirá su gala de entrega de premios el próximo 15 de abril en el Teatro Principal de Valencia, con las cámaras de Televisión Española en directo. El notario de los premios Max, Francisco José Monedero, será el encargado de leer el nombre de los tres candidatos a cada una de las estatuillas, las ya célebres manzanas con antifaz que diseñara el recordado Joan Brossa. La presidenta de la Junta Directiva de la SGAE, Ana Diosdado, y el secretario general de la Fundación Autor, Francisco Galindo, flanquearán al notario en esta lectura. Una vez conocidos los finalistas, los electores disponen de margen hasta el 22 de marzo para enviar sus papeletas con el nombre de los ganadores.
A los 24 galardones a concurso hay que sumar otros cinco honoríficos, que otorga directamente el Comité Organizador de los Max. Se trata del Premio de Honor, el Premio de Teatro Alternativo, el Premio Especial de Circo, el Premio Hispanoamericano y el de Proyección Internacional. El listado de candidatos de los Premios Max, elaborado en colaboración con todas las asociaciones teatrales del país, suma este año la friolera de 8.170 nombres. A título de ejemplo, sólo en la categoría de Mejor Actor de Reparto figuran un total de 1.173 candidatos, mientras que para Mejor Actriz de Reparto hay 792 entradas, o 563 para dirimir el Mejor Director de Escena.
Con su apuesta por la ciudad de Valencia, la SGAE ha querido reconocer en esta edición la gran sensibilidad demostrada por la Generalitat Valenciana hacia el mundo de las artes escénicas, así como el gran empuje que la capital levantina ha prestado estos últimos años a la promoción cultural en su conjunto.
