Marta Carrasco despide ‘Aiguardent’ en La Abadía de Madrid
Del 10 al 20 de abril en La Abadía de Madrid, Marta Carrasco despide su espectáculo ‘Aiguardent’, que le valió el reconocimiento unánime como una de las grandes creadoras de nuestros escenarios. En 1995 Marta Carrasco decidió dejar los trabajos corales, dar el salto y crear un espectáculo unipersonal que ella misma interpretaría y coreografiaría. Doce años después sigue metiéndose en la piel de esa mujer sola, al límite del abismo, que encuentra en el alcohol el único refugio para sus angustias. Aquel espectáculo se llamó Aiguardent y consiguió abrir nuevos caminos para la síntesis del teatro y la danza en nuestro país.
El éxito incontestable del espectáculo confirmó a Marta Carrasco como uno de los talentos emergentes ‘Blanc d’ombra. Recordant Camille Claudel’ (1998), ‘Mira’m’ (2000), ‘Eterno? Eso sí que no!’ (2003), ‘Ga-gà’ (2005) y ‘J’arrive…!’ (2006) han recibido innumerables premios de la crítica, Butaca, Max, Ciutat de Barcelona y el Premi Nacional de Dansa de la Generalitat de Catalunya en reconocimiento a la trayectoria de su creadora.
Durante todo este tiempo y a pesar del éxito de sus nuevas creaciones, ‘Aiguardent’ no ha dejado de representarse periódicamente ni de cosechar éxitos ininterrumpidos. El espectáculo ha crecido y ha evolucionado, se ha hecho más preciso. Y su protagonista ha llegado a un punto de control tan absoluto que se permite jugar con él, retorcerlo y matizarlo hasta crear un espectáculo diferente cada noche.
Ahora ‘Aiguardent’ deja de existir y en los diez días que permanecerá en La Abadía Marta Carrasco dice adiós con mucho cariño y algo de nostalgia, pero convencida de que es el broche perfecto para un capítulo clave en su trayectoria profesional. Empieza ahora una etapa de búsqueda, de exploración de nuevos caminos artísticos hasta ahora intransitados. Reinventarse y realimentarse sin abandonar la esencia de su arte, su propia y peculiar idiosincrasia, y por supuesto sin abandonar los escenarios que siguen siendo hoy por hoy su hábitat natural.