La obra «Pan con Pan» de Trapu zaharra y Zanguango triunfó en los V Premios Max en la edición de 2002 al conseguir el Premio al Mejor Espectáculo Revelación de las Autonomías. La obra de Arthur Miller, dirigida por Miguel Narros y producida por Andrea d’Odorico, obtuvo seis de los más preciados galardones en juego. En cuanto a la danza se refiere, la bailarina y coreógrafa Sol Picó se hizo con dos estatuillas mientras que el Premio al Mejor Espectáculo se lo llevó «Amargo». La Gala de entrega de los V Premios Max de las Artes Escénicas creados por la Sociedad General de Autores y Editores se celebró ayer noche en el Teatro Principal valenciano, concediendo los mayores honores a la obra «Panorama desde el puente», obra que recibió seis galardones: el Premio al Mejor Espectáculo de Teatro, Mejor Dirección para Miguel Narros, Mejor Adaptación para Eduardo Mendoza, Mejor diseño de Iluminación para Juan Gómez-Cornejo, Mejor Actor Protagonista para Helio Pedregal y Mejor Actriz de Reparto para Alicia Sánchez.
«Madre, el Drama Padre», espectáculo que competía con «Panorama desde el puente» por los ‘premios gordos’, se quedó tan sólo con dos de las estatuillas, la de Mejor Actriz a Blanca Portillo y la de Mejor Figurinista a Javier Artiñano.
La danza tuvo como protagonistas a Sol Picó y Rafael Amargo, que se repartieron sendos premios. La bailarina y coreógrafa de Alcoi recibió las estatuillas correspondientes a las categorías de Mejor Coreografía y Mejor Intérprete Femenina de Danza por el espectáculo «Bésame el cactus», mientras que Rafael Amargo recibió el correspondiente a Mejor Espectáculo de Danza y Mejor Intérprete Masculino de Danza por «Amargo».
En cuanto al género musical, hubo repartición, ya que el Premio al Mejor Espectáculo recayó sobre «Hello Dolly», el de Mejor Dirección sobre Carles Santos por «La pantera imperial» y el de Composición Musical sobre Santiago Auserón por «Cacao».
Los Premios al Mejor Autor fueron a parar a manos de José Ramón Fernández, Yolanda Pallín y Javier García Yagüe por «Las Manos» en la categoría de castellano; Bernardo Atxaga por «Bambulo» en la de euskera; Paco Mir por «No es tan fácil» en catalá; y Cándido Pazó por «Ñiki Ñake» en galego.
