Un grupo de cuarenta jóvenes brasileños de entre 15 y 30 años llega al Estado español para denunciar el trabajo esclavo que aún existe en su país. A través del teatro, la capoeira y la danza, la obra ‘Quilombagem’ recoge en primera persona el testimonio de los propios trabajadores sobre un crimen que según los datos oficiales sufren más de 25 mil brasileños, aunque las organizaciones no gubernamentales defienden que la realidad podría doblar esta cifra. Ayer, lunes 8 de diciembre, abrieron su gira en el Teatro Filarmónica de Oviedo logrando completar el aforo. Quilombagem conmovió e hizo vibrar a los 700 asistentes al teatro, quienes al final saltaron al escenario a felicitar a los 40 actores. Los fondos recaudados de la venta de las entradas están destinados a la creación de un Centro Cultural en Açailândia, ciudad de la que procede este grupo. Esta noche, se prevé un nuevo lleno en el Teatro Jovellanos de Gijón.
«Quilombagem es un espectáculo que retrata la explotación de miles de trabajadores brasileños que, a costa del trabajo forzado, generan riqueza y venden la falsa imagen del desarrollo en Brasil» afirma la española Carmen Bascarán, directora de la obra y fundadora del Centro de Defensa de la Vida y de los Derechos Humanos, ONG brasileña a la que irá destinada la recaudación íntegra de la taquilla para la construcción de un Centro Cultural en Açailândia, uno de los lugares en Brasil donde más casos de trabajo esclavo se registra.
A través de la danza, la capoeira y el teatro, la obra realiza un paralelismo entre la época colonial, en la que la expansión del tráfico de seres humanos esclavizó a miles africanos que fueron trasladados a Brasil, y la que hoy sufren sus descendientes, hombres y mujeres que bajo la falsa promesa de un trabajo digno malviven en el interior de grandes haciendas del país, sin recibir un salario, endeudados y sometidos a la explotación laboral y la miseria.
Jarete Ribeiro, de 18 años, explicó que «con esta experiencia he conocido y sentido el sufrimiento de los trabajadores esclavos». Jarete participa como actriz en la obra, y su papel le lleva a recordar «a los esclavos en los hornos de las carbonerías, en el campo, cortando yukira… Veo la explotación, la miseria, el trabajo infantil…y la emoción va subiendo hasta que al final llega el grito en el que convido a todo el mundo a luchar, a no desistir, a no dejarlos en el camino, ese es, a la vez, mi grito de denuncia y de libertad», dijo la joven brasileña, que junto al resto del grupo llega mañana a España.
El Centro de Defensa de la Vida y de los Derechos Humanos (CDVDH), fundado por Bascarán hace 12 años, acoge a los trabajadores que consiguen escapar de las grandes haciendas donde son esclavizados. El CDVDH recoge sus denuncias y las encamina a la justicia para que los fiscales de trabajo localicen y liberen a los compañeros que continúan siendo explotados y retenidos.
En el ámbito de la prevención, el Centro de Defensa realiza proyectos de recuperación de niños, adolescentes, jóvenes y adultos en situación de riesgo, donde han recibido su formación los cuarenta participantes del Quilombagem. Desde su fundación en 1996, más de 5.000 menores han participado en las actividades de danza, teatro, capoeira y comunicación social organizadas por el CDVDH, todas ellas acompañadas de un proceso de sensibilización en temáticas sociales que les ha ayudado a construir una visión crítica sobre el mundo que hoy les trae a España a denunciar un crimen que no les es ajeno.
Ciudades de la gira
OVIEDO – Teatro Filarmónica, 8 de diciembre.
GIJÓN – Teatro Jovellanos, 9 de diciembre.
MIERES – Auditorio de la Casa de la Cultura de Mieres, 10 de diciembre.
A CORUÑA – Teatro Rosalía de Castro, 11 de diciembre.
SANTIAGO DE COMPOSTELA – Colegio Peleteiro, 13 de diciembre
LUGO – Auditorio Gustavo Freire, 14 de diciembre.
SEVILLA – Teatro Lope de Vega, 16 de diciembre.
BARCELONA – Centre Artesà Tradicionàrius (CAT), 19 de diciembre.
MADRID – Teatro Colegio Maristas de Chamberí, 21 de diciembre.
