El Teatro Alhambra de Granada acoge, del 20 al 22 de enero, el reestreno de ‘Un horizonte amarillo en los ojos’ espectáculo protagonizado por el actor Carlos Gil Company sobre el texto de Gracia Morales. Sobre el escenario, un hombre que vaga por un paisaje arrasado, llevando a cuestas un carro lleno de sacos de tierra y la carga de un pasado traumático. El encuentro azaroso con un joven viajero le permitirá aliviar el peso de los recuerdos, hallar la paz y, posiblemente, el perdón.
El protagonista de Un horizonte amarillo en los ojos podría haber huido de un campo de refugiados, escapado de una guerra o sobrevivido al fin del mundo. Remiendo Teatro deja en manos del espectador el contexto del espectáculo con el que iniciaron su andadura profesional en 2004. En palabras de su director, Antonio Hernández Centeno «Gracia Morales nos ofrece un monólogo dramático lleno de lirismo y poesía crítica hacia la sociedad en la que vivimos. Un personaje lleno de aristas, de contradicciones vitales, de violencias internas, odios incontrolados destinados a ser vomitados. Y con una necesidad de amar, de ser escuchado y perdonado que le obliga a comunicarse con un chico que se encuentra en mitad de su eterno camino.»
La calidad del texto viene refrendada por la autoría de Gracia Morales, cofundadora de la compañía granadina y merecedora de destacados galardones, como el Premio Marqués de Bradomín (2000), el Premio Romero Esteo para jóvenes autores andaluces (2003), el Premio SGAE de Teatro 2008 y el reciente Premio SGAE de Teatro Infantil y Juvenil 2011.
«Incomunicación, individualismo exacerbado, desarraigo, exilio, violencia, ausencia de valores, injusticia social…: Un horizonte amarillo en los ojos construye la metáfora de un mundo irreal, pero inquietantemente posible», considera la dramaturga granadina.
Con este espectáculo, Remiendo Teatro confirma su apuesta por un teatro de calidad en todos sus componentes, comprometido, indagador e interrogante, que busca y recrea un espectador inquieto y cómplice. Con un lenguaje donde se reconoce la influencia de lo poético, pero sin renunciar a la comunicación fluida y cercana con un público joven y adulto, el trabajo de la compañía mezcla lo real-cotidiano con elementos mágicos y simbólicos. Sus propuestas estéticas se caracterizan por construir mundos alternativos al real, mediante los que se consigue presentar visiones más lúcidas y complejas sobre nuestra sociedad.
Toda la información en la revista ARTEZ nº 177: Un horizonte amarillo en los ojos-Remiendo Teatro
