La compañía Residui Teatro realizará el próximo 14 de junio en el Centro de Artesanía de las Artes Escénicas, su nuevo espectáculo ‘El Canto a la Luna’. Se trata de una obra original que combina texto, danza y canto en la que se desarrolla una historia narrada a través de la voz de tres mujeres.
El Centro de Artesanía de las Artes Escénicas (C/ de la Nao, 4. Primera Planta. Madrid) acoge el 14 de junio el preestreno de ‘El Canto a la Luna’ un trabajo que según sus creadores «es la voz de todas las mujeres que se levanta desde hace mas siglos de los que podemos contar. Voces a veces perdidas en la telaraña de la razón o castigadas por las religiones y el poder del hombre. ‘El canto a la luna’ es la voz de todas las mujeres que renace y vuelve a vivir a través de otros cuerpos y generaciones».
Residui Teatro sitúa la obra en un país que acude a la batalla, mientras relámpagos de tempestad desde el cielo cortan las venas. Solo tres mujeres quedan. Una tiene miedo a luchar, a elegir el bando equivocado; la otra es ya demasiado débil, de haber sufrido. La tercera hace, sencillamente, lo que hay que hacer.
La reflexión sobre el universo femenino en Tempestad «ha detonado materiales escénicos que las mismas actrices han creado y han llevado a la sala para que sean mezclados con agua, sal y piedras. El proceso de creación nos ha regalado tres personajes (la mujer de rojo, la de blanco y la de negro)».
La lavandera es roja como la pasión, acaba de entender que en el fondo, a veces, no hay nada, que la verdad se esconde y que la luna llena que ilumina los caminos es siempre la misma luna. Es la mujer que se pierde.
La vieja (o la niña triste) es negra como la noche, como el ego que destruye todo lo que hay alrededor. Pero el tiempo se burla de ella, hace bromas a la niña y a la señora que se mira en un espejo y se da cuenta de que ya es una vieja, y que no se atrevió a cambiar su camino.
La loba es blanca como la luna llena, desaparece y aparece allí donde el río se llena de lagrimas, canta a los hombres y a las mujeres que su destino baila junto con el tiempo, media entre los mundos, baila los miedos y como payasa sagrada se burla de ellos.
