Sol Picó emprende un viaje para encontrar el paraíso en “La prima de Chita”
La compañía de danza Sol Picó estrenará los días 21, 22 y 23 de julio su nueva producción, ‘La prima de Chita’ en el Teatre Grec dentro del 30 Festival de Barcelona Grec. «La prima de Chita» es el nuevo espectáculo de la compañía SOL PICÓ DANZA y está coproducido por el 30 Festival de Barcelona Grec y el Festival Temporada Alta de Girona y en colaboración con el Ajuntament de Tarragona.
El espectáculo recrea la historia de unos personajes que, cansados de la Tierra, deciden huir y buscar un nuevo territorio para vivir. La coreógrafa reflexiona en clave de cómic sobre el azar y sobre lo que somos en su nueva producción. En esta nueva propuesta, coproducida por el Grec y el Festival Temporada Alta y en colaboración con el Ayuntamiento de Tarragona, Sol Picó recrea la historia de unos personajes que, cansados de su vida en la tierra, deciden emprender un viaje. Cuando lleguen a su destino, encontrarán a alguien inesperado, alguien que tuvo la misma idea que ellos un tiempo atrás.
A través de esta huida al espacio, la bailarina y coreógrafa se planteará preguntas como: ¿Qué hago realmente en la vida?, ¿A dónde me dirijo?, ¿Qué reserva de energías tenemos?, ¿Somos capaces de decir adiós?, ¿Encontraremos un nuevo territorio, físico o mental, dónde acudir?
Las respuestas a todas estas cuestiones las encontrará en LA PRIMA DE CHITA, la historia de un viaje, de un descubrimiento, de una tierra prometida, una locura, una huida, un reencuentro, un degüello, una alteración… En clave de cómic, Sol Picó reflexiona sobre el azar y sobre lo que somos.
Seis bailarines, tres hombres y tres mujeres, se encargarán de escenificar esta singular historia que trasladará al espectador al medio del cosmos. La música de Mireia Tejero se fusionará en directo con el movimiento de los bailarines y se basará en la proximidad ancestral que consiguen las percusiones de Krishoo Monthieux, la visceralidad de la voz de Dácil López, el piano de Ivan Santaeulària y la melancólica locura del saxo de la propia Tejero.
Sol Picó pertenece a esa generación de coreógrafos y artistas escénicos inventores de mundos, creadores de un estilo y de un lenguaje personal más allá de lo preescrito, de lo establecido, más atentos al aliento vital, a una poética de lo bastardo y canallesco.