Solicitud de apoyos ante el desalojo del Centro Cultural la Barraca
Los responsables del Centro Cultural la Barraca (Pinto 562 – Pergamino, Argentina) solicitan apoyos ante la orden de desalojo estando en la mitad del ciclo lectivo. Comunicado del Centro Cultural la Barraca
El Centro Cultural la Barraca nace gracias a una «cortesía» del actual Intendente Municipal, Héctor María Gutiérrez, al que solicitamos un lugar para expresarnos artísticamente, tanto nosotros como otros artistas de diversas disciplinas. El nombre se debe al del grupo de teatro (inspirado por aquel grupo trashumante que lideró García Lorca) impulsor de la idea, elenco que ya tiene nueve años de vida, más lo que corresponde a Juventud de Teatro, raíz y base de la formación. Estamos hablando de una trayectoria en la ciudad de 35 años de trabajo continuo.
En el Centro Cultural La Barraca hoy trabajan (además del grupo de teatro mencionado que este año presentó una obra de Chéjov adaptada y dirigida por Emilia Mazer en la sala que lleva el nombre de un «Hijo Distinguido de la ciudad», Juan Carlos Puppo y se aspira a otros estrenos en el término de la actual temporada) la profesora de danzas María Elena Oviedo con más de 40 alumnos en su haber; el artista plástico Jorge Bertero con un número importante de adultos en aprendizaje; el Grupo de Artesanos Independientes que organiza las ferias artesanales de la ciudad, profesoras de Inglés con cerca de 30 alumnos y un curso de investigación teatral con varios interesados participando. Es decir que es mucha la gente que depende de ese espacio físico para desarrollar su creatividad, desde los más chiquitos a los adultos.
El Intendente nos exige desalojar, no nos importan las razones, pero hace solo dos años que estamos allí y estamos en la mitad del ciclo lectivo. No pretendemos quedarnos eternamente allí, pero también sabemos que el Intendente no sabe lo que se trabaja en el lugar; ni siquiera lo visitó alguna vez. Por el momento queremos conversar con él y hacerlo desistir de la idea de echarnos a la calle. Y si algún día nos echa, al menos queremos que le dé un lugar a toda la gente que allí trabaja para continuar su tarea y trasladar el material que tenemos en el inmueble. Además de los correspondientes subsidios para cubrir los gastos que implicaron los arreglos necesarios para que el lugar funcionara como debe ser, ya que cuando entramos era un sitio abandonado sin agua, sin baños, sin vidrios, sin… sin nada. El todo lo pusimos los artistas a los que ahora pretenden dejar en la calle.
Nuestra primera instancia es el diálogo, pero no nos vamos a callar ni retirar en silencio; mucho menos a esta altura del año.
Ojalá el Intendente radical sepa escuchar.
Quienes opinen como nosotros, adhieran a esta nota, poniendo solo su nombre al final de la misma. Sabemos que todo lo que escribimos por mail, llega al escritorio del Intendente Municipal, aún los que son privados. Siempre hay alguien encargado de las tareas de «espionaje barato». Entonces que llegue también esto.
Esperamos adhesiones en labarraca_grupo@yahoo.com.ar . Gracias