Te haré invencible con mi derrota/Angélica Liddell
Las cuerdas del corazón
La versión más física de Angélica Liddell es también la versión más lírica, la que se mueve en los sentimientos más profundos, para colocarnos ante el vértigo de una vida truncada por una enfermedad como la esclerosis múltiple sufrida por la violonchelista Jacqueline Du Pré, que le llevó a la muerte con apenas cuarenta y dos años.
Inspirada en su vida, acompañada por su obra, evocando la peripecia vital de una artista que ve como en plena capacidad creativa pierde posibilidades de expresión, lo que convierte a su violonchelo no en un instrumento, sino en un campo de batalla, lo mismo que su cuerpo, afectado durante diecisiete años por una incapacitante enfermedad que le hizo retirarse cuando era una brillante artista.
No se traza ninguna línea biográfica, sino una relación afectiva, emocional en dos planos, que lleva a una entrega física, mental, espiritual de la actriz hasta límites asfixiantes para el espectador, pero que responde a una estrategia escénica que funde dramaturgias visuales, textuales, de movimiento y musicales para describirnos un cuadro desgarrador, una suerte de soledad cósmica manifestada en momentos de una verdad escénica hiriente físicamente para quien mira, escucha, siente lo que está sucediendo en el escenario: un ceremonial de la vida traicionada, una increpación de amor desatendido, una resistencia ante la conformidad acrítica, una cantata tocada con las cuerdas del corazón. En las claves genuinas de esta gran creadora escénica, Angélica Liddell, fiel, coherente, trascendental, sublime, violentamente amorosa.
Carlos Gil Zamora
Obra: Te haré invencible con mi derrota
Autora, directora e intérprete: Angélica Liddell
Iluminación: Carlos Marquerie
Producción: Atra Bilis
Théâtre de Bayonne – 18-10-11 – Les Translatines