La Fundición de Bilbao acoge esta semana dos propuestas de Teatro L’alakran. El martes 27 y el miércoles 28 ofrecerá ‘Psicofonías del Alma’, una exposición viviente a partir de textos de Robert Filliou, y el viernes 30 y sábado 1, ‘Optimistic vc Pessimistic’ obra dirigida por Óskar Gómez. Psicofonías del alma. Inspirada en textos de Robert Filliou, Leonardo da Vinci, Oskar Gómez Mata y Esperanza López, hace alusión a las diferentes voces que cada uno puede percibir en su interior. Los propios integrantes de la compañía aseguran que «con este espectáculo deseamos cambiar la relación con el público, invitándolo a un espacio-exposición donde los objetos y las presencias están puestos en evidencia de una manera directa”.
Los objetos que se muestran en esta exposición, con la idea de ofrecer poemas visuales o reflexiones sobre la cotidianeidad, se entremezclan con fragmentos de teatro, por donde circula el público que carece de un lugar estable en el que instalarse y que debe decidir por dónde y cómo moverse. Los días 30 de setiembre y 1 de octubre, La compañía suiza L’Alakran que dirige Oskar Gómez Mata presenta en Bilbao un trabajo que, según aseguran, “nace de la necesidad de responder de una manera lúdica y profunda a la realidad que nos ofrece siempre un lado optimista y otro pesimista” y que tiene como base los textos escritos por Peru C. Saban, Ignacio Fernández de Jaúregi, Esperanza López, y el propio director.
Este proyecto que ha sido denominado como Optimistic vs. Pessimistic y que tiene en su punto de partida la impresión de los integrantes de la compañía de que “los poderes políticos y económicos han conseguido el embrutecimiento general de los individuos de nuestra especie”, está concebido como una experiencia terapéutica que habla de los placeres simples y esenciales, físicos e instintivos, antes de convertirse en intelectuales. La puesta en escena se compone de varias partes que van desde el espectáculo teatral a la performance escénica o al ‘happening’, por lo que este conjunto se puede considerar un ‘work in progres’ cerrado.
Este espectáculo que se presentó el pasado mes de junio en el Théâtre Saint-Gervais de Ginebra, y que según los integrantes de la compañía “se puede consumir de maneras diferentes, entero o por partes”, continúa la idea de creaciones precedentes en las que se establece una relación con el público diferente a la del teatro denominado ‘clásico’, ya que el actor-actriz debe enfrentarse a un juego que está constantemente ‘en el alambre’, tensado entre los que se dice convencionalmente ‘un rol’ y su ‘doble escénico’.
A pesar de ello, la puesta en escena intenta romper con la trampa de la relación escenario-sala, no interviniendo en la sala o pidiendo al público de intervenir en el juego, sino instaurando un estrecho diálogo con los espectadores, basado en que “estamos aquí juntos, ahora, en este mismo momento”.
Con la finalidad a un mismo tiempo de “enseñar y aprender”, Optimistic vs. Pessimistic pretende “cuestionar sobre la sensación de angustia, de inseguridad y de soledad del ser humano moderno. Sobre la luz y la oscuridad. Sobre nuestro destino trágico y nuestro deber de mantenernos siempre en equilibrio, continuamente en movimiento”, indica Oskar Gómez.
Con Optimistic vs. Pessimistic, el director reconoce que tras la experiencia de Psicofonías del alma, obra que se representará en el mismo escenario de La Fundición los días 27 y 28 de septiembre, “tenía ganas de ir más lejos en esta relación a la vez íntima y suave que se produce en este espectáculo. Sobre la base de la ausencia de conflictos (no hay problemas entre vosotros y nosotros), la ausencia de obligación (a los que no les guste o no se encuentren bien no tienen que sentirse obligados a quedarse), sobre el hecho que nada es grave en el hecho artístico, que las cosas importantes son las cosas de la vida, se trata de crear una connivencia escena-sala, apoyándonos en el hecho: nada es blanco o negro, feliz o desgraciado, optimista contra pesimista, sino al contrario, todo está ‘entre dos’. Lo que deseo es llevar al espectador a hacer opciones que parecen anodinas a simple vista: elegir quedarse o marcharse de un espectáculo; odiarlo o amarlo, pero en cualquier caso, que se atreva a pronunciarse sobre una opción”.
La nueva producción de L’Alakran que incide en torno a la “idea de representar el fracaso humano”, tiene en su origen la performance El estado del poder, primera forma del proyecto que fue presentado en el Centro de Arte Contemporáneo La Casa Encendida de Madrid en octubre de 2004, y que siguió con el proyecto realizado en el Festival de Berna ‘Est-Ouest’ en la Dampfzetrale en marzo de 2005.
