Temporada Alta culmina su ‘mejor edición’ y pide que haya una apuesta por la cultura
La edición de este año de Temporada Alta ha sido la mejor de las 19 que se han hecho hasta ahora. Lo dice su director artístico, Salvador Sunyer. Y lo confirman las cifras. Temporada Alta cerró el pasado domingo 12 de diciembre con un total de 52.808 espectadores, unos 2.500 más que el año pasado (un 7,16% más), y con una ocupación media del 90,37%. A lo largo de más de dos meses, entre el 1 de octubre y el 12 de diciembre, el festival ha acogido 76 espectáculos, de los cuales 24 eran estrenos absolutos. «Hemos sido, durante más de dos meses, la capital de la cultura escénica de Cataluña», ha señalado Sunyer, que ha añadido que «Temporada Alta es el festival de referencia en Cataluña, en el Estado español, y empieza también a serlo en Europa». Las cifras del Festival son bastante evidentes del éxito de esta decimonovena edición. Se han programado 112 funciones (más las actividades complementarias) y se han programado 15 nuevas funciones, que hacen un total de 127 representaciones. Además, se han agotado las localidades de 71 funciones, a pesar de que por primera vez, los ciudadanos han tenido acceso a la compra de localidades hasta muy entrado el Festival.
El público continúa siendo el mejor aliado del Festival. En un año de fuerte crisis, ha sido cuando más público ha asistido a las funciones del festival Temporada Alta y no solo a los espectáculos más populares, sino también a propuestas más arriesgadas o internacionales (han agotado las localidades espectáculos como por ejemplo los de Krystian Lupa, Claudio Tolcachir, Michael Pennington, Teatri Uniti, Obludarium de los hermanos Forman). Este año, a pesar de que se han programado una treintena de espectáculos extranjeros y 24 estrenos absolutos, la práctica totalidad de los montajes del festival Temporada Alta casi ha llenado el aforo.
Motor de la escena catalana
A pesar de las cifras, Salvador Sunyer ha destacado el hecho de que se haya trabajado para conseguir uno de los objetivos del Festival: convertirse en «motor escénico del país». Así, entre Temporada Alta y El CANAL Centro de Artes Escénicas Salt/Girona se ha producido, coproducido y colaborado en la producción de 25 espectáculos. «Tenemos creadores de talento y equiparables a los mejores de Europa», ha indicado el director, que ha reiterado que el objetivo del festival es «convertir la zona de Girona y Salt en un espacio de creación y que todos los sectores involucrados en las artes escénicas la consideren una zona para instalarse».
Entre las producciones de autoría catalana impulsadas por EL CANAL y Temporada Alta hay que destacar, entre otros, Chicha Montenegro Gallery, de Carles Santos, Joan Maragall: La llei d’amor, de Joan Ollé o Concert Tempestiu, de Xicu Masó. Por otro lado, hay que contar que EL CANAL también ha coproducido otras propuestas, en este caso con el Teatre Lliure, como por ejemplo Celebración de Harold Pinter (dirigida por Lluís Pasqual), Tot, de la compañía gerundense La Mentidera o Lola la comedianta, dirigida por Jordi Prat.
Motor económico
El director también ha destacado el papel que juega el festival en la dinamización del sector económico de la zona. Este año un total de 312 personas han trabajado directamente para el Festival, mientras que los equipos artísticos y técnicos de todos los espectáculos han tenido 917 personas trabajando en los distintos espacios. Tampoco es despreciable la cifra de reservas de hoteles.
Desde el festival se han gestionado 1.316, a pesar de que a esta cifra hay que sumarle todas las habitaciones contratadas por las compañías, los profesionales y el público.
Una mirada al futuro
Salvador Sunyer se ha mostrado muy satisfecho del festival de este año. Aún así, considera necesario que se siga invirtiendo en el sector cultural. «Si se tiene que convertir en un sector estratégico de nuestro país, se tiene que apostar», ha señalado. Por eso, pide al nuevo Gobierno de Cataluña, que tenga en cuenta esta inversión y «no cometa el error de olvidar la cultura».