El pasado martes 16 de abril se estrenó en el Teatro Palladium de Londres la obra «Chitty Chitty Bang Bang», el musical más esperado de la temporada y la producción más cara que se haya visto el West End londinense. A pesar de contar la producción con un presupuesto cercano a los 10 millones de euros y con trece millones recaudados en venta anticipada de localidades, el cochecito volador ideado por Ian Fleming se negó a volar el día posterior al estreno, por lo que la función del17 de abril hubo de ser cancelada. Los espectadores que en un principio podían considerarse afortunados por contar entradas para la segunda función de un musical que ha batido récords de expectación y por consigu¡ente de venta de entradas anticipadas, tuvieron que regresar con las manos vacías al suspenderse la función de «Chitty Chitty Bang Bang» por un fallo eléctrico en el sistema informático del coche y que impidió que éste volara como lo hizo el día anterior sobre las cabezas de estrellas del cine y el espectáculo como Pierce Brosnan o Halle Berry.
A pesar de todo, los técnicos lograron que el coche sobrevolara la platea dos horas después de la hora en que debía haber comenzado el espectáculo, si bien en ese momento las butacas se encontraban vacías. Una vez solventados los problemas técnicos, los productores del musical han prometido que los espectadores damnificados serán repartidos en futuras funciones.
