El día después
Escribir cuesta. Escribir cuando se lleva una semana durmiendo entre 3 y 4 horas cada día cuesta más. Lo sé, podía haber sido previsor y haber compartido con ustedes un artículo escrito con anterioridad, sobre cualquier otro tema, pero me parecía un reto hablar de ‘otras escenas’ desde la situación en la que me encuentro.
Para los que trabajamos en FiraTàrrega, la segunda semana de septiembre es muy intensa. Son días de actividad frenética y también mucha presión. La capital del Urgell entera se torna espacio escénico, marco y fondo de diferentes actividades tanto artísticas como profesionales, acogiendo decenas de miles de espectadores.
Con tantas cosas pasando y de tanta envergadura, uno tiene la impresión que durante los cuatro días de Feria un duende mágico o ente sobrenatural nos acompaña y cuida de nosotros, hace todo que lo que puede y más para que el engranaje funcione y el público participe cívicamente. Estamos hablando de una maquinaria de altísima precisión, orfebrería organizativa que condensa en menos de 96 horas 288 representaciones. La cifra me impresiona, cada año y mucho.
Como todos sabemos, que las cosas salgan bien no tiene que ver con la superstición o las hadas. Unas y otras escenas se asientan sobre el trabajo de muchos y diferentes profesionales. Pero cuando nos referimos a las Artes de Calle, a la creación no convencional, todos sabemos que la logística, la producción y también la exhibición dependen de muchísimos más factores. Producir en el espacio público es agotador, pero los retos que supone y las alegrías que comporta son inmensos –disculpen si resulto demasiado subjetivo, es lo que tiene el cansancio, uno se pone sentimental con mucha facilidad-.
Dedico estas palabras de profundo respeto y admiración a todos los que formáis parte de esta familia apasionada y no aparecéis en los créditos de los programas. Va por vosotros, regidores de espacio, técnicos, productores, trabajadores de la brigada municipal, montadores, personal de seguridad y tantos otros… como trapecistas tenemos mucha suerte de poder contar con la seguridad que ofrece vuestra red.