Un espectáculo fin de carrera del Institut de Teatre de Barcelona gana todos los premios del Festival S’Illo
Se trata de ‘Exercicis de crueltat per a infants’
Un espectáculo presentado como fin de carrera por alumnos del Institut de Teatre de Barcelona ha ganado todos los premios de la undécima edición del Festival s’Illo de Santanyí, Mallorca, tanto los Illo de Dramaturgia, Dirección e Interpretación como el de Mejor Espectáculo ‘La Teta Premium’, lo que supone un hecho inédito en la historia de este certamen, que se ha celebrado durante una semana en la sala de creación Sa Talaia.
Así, Enric Marzà ha ganado el Premio de Dramaturgia; el de Dirección ha sido para Arnau Sanromà y el mismo Enric Marzà y ambos han ganado, junto a Clara Mir, el premio a la mejor Interpretación, que es conjunto entre los tres, pero cada espectador podía votar independientemente a cada uno de ellos. En la técnica de luces y sonido estaba Jordi Mero. Todos ellos participaron con el espectáculo ‘Exercicis de crueltat per a infants’, un trabajo de fin de carrera del Institut del Teatre. «El espectáculo es realmente una maravilla de teatro textual en el juego vocal y corporal de ritmos, creación de personaje, historia y puesta en escena, una auténtica lección de teatro para los espectadores que salían sorprendidos en todas sus vertientes de cuerpo, voz e interpretación», señala la organización.
Compitieron con grandes profesionales ganadores de premios internacionales y nacionales de la talla de Ernesto Artillo, que el año pasado ganó La Teta Premium junto con el colectivo Nadie, Beatriz Torres ganadora en otra edición de s’illo, el bailarín colombiano Eduard Mar, la sevillana Rocío Cuadrelli, la cía de Josuè Guasch Teatritx, Blanca Alonso, entre otros. «La organización quiere destacar el gran nivel de todos los espectáculos de este año, por lo que no era precisamente un año en el cual era tan evidente apostar por un solo ganador».
El espectáculo ganador presenta un mundo caótico y corrupto, en el que dos hermanos gemelos viven ocultos en un jardín. Lejos de rendirse ante la amenaza del exterior, los niños deciden practicar una serie de ejercicios de crueldad para endurecerse y prepararse para el mundo que les espera. La crueldad y violencia latente del entorno donde viven les lleva a emular la crueldad que ven en él. De una inteligencia superior, serán capaces de utilizar cualquier recurso para sobrevivir dentro de este jardín.
