A lo largo de cuatro semanas, entre el 30 de enero y el 26 de febrero, se celebra en Madrid el Festival Escena Contemporánea que con el objetivo de mostrar la vitalidad de la creación actual en las artes escénicas apuesta por la ruptura de códigos formales y la creación de vanguardia. En esta su sexta edición cuarenta y siete compañías internacionales ofrecerán cincuenta y seis montajes de teatro, danza, música, performances, instalaciones, videoproyecciones y se prevén mesas redondas, seminarios y talleres en diecisiete espacios de la ciudad y en tres municipios de la Comunidad de Madrid. Asimismo algunas de las creaciones podrán ser vistas en la sala La Fundición de Bilbao. Con la representación de Atlas (o antes de llegar a Barataria), el trabajo más reciente de la compañía catalana de danza Mal Pelo, arrancó el 30 de enero el festival Escena Contemporánea, que en esta su sexta edición se presenta con una programación marcada por una fuerte presencia de compañías internacionales. Asimismo, y como ya lo hiciera el año anterior, continúa la colaboración con el proyecto ¡Mira! de Toulouse acentuando el carácter de internacionalidad, movilidad y difusión de la creación artística uno de los objetivos prioritarios del evento.
La amplia programación general se completa un año más con varios ciclos todos ellos con su particular programación de espectáculos y como novedad este año se va a llevar a cabo el Primer Encuentro de Programadores.
Rica y variada
Entre los espectáculos que conforman la programación del festival caben destacar diversas obras teatrales tales Ventajas de viajar en tren o 1080 recetas de mierda de Teatro del Temple, pieza en la que se mezcla realismo e imaginación a través de las contradicciones que paulatinamente van invadiendo la escena, la propuesta de la compañía catalana Sala Beckett sobre el texto de Juan Mayorga Animales Nocturnos, obra de tinte político que en palabras de su directora, Magda Puyo tiene como objetivo sacudir los pensamientos acomodados, o el montaje de tintes grotescos La Belle Cousine de los andaluces Teatro del Velador.
La presencia de la danza es más que significativa con piezas de compañías como Enclave – Roberto Oliván y su tercer trabajo, De Farra, una fiesta de siete bailarines y un hombre “orquesta” presentado de una forma sorprendente, o las propuestas de las austriacas Saskia Corpsd y Milli Bitterli. La primera presenta con la compañía Dans.Kias Expositions Corps una obra sobre la búsqueda de la subjetividad del propio cuerpo mientras que la segunda, pone en escena una coreografía de las emociones con What remains of me? Part 2.
Entre la extensa programación dancística cabe mencionar también la posibilidad de disfrutar del último trabajo de la bailarina Cuqui Jerez, The Real Fiction o de The Application del coreógrafo Juan Domínguez como el resultado del proyecto de la próxima pieza o lo que es lo mismo la solicitud para la puesta en escena del proyecto titulado “Shichimi togarashi”.
Otros lenguajes
A su vez cabe destacar el único espectáculo de ópera Sodom, que llega de la mano de La fiesta de los locos y es un proyecto de Eduardo Costa que pretende devolver la fe de asistir a la ópera, a través de contar historias que interesen al público de hoy sin volver la espalda a los lenguajes escénicos contemporáneos.
Tampoco van a faltar nuevos lenguajes escénicos como el espectáculo de nuevo circo de Thèâtre Dromesco, la cantina musical La Baraque o las performances Parce que je t´aime de los suizos Buissonière o Voet de los holandeses Veenfabriek.
Mirada a Portugal
Como ya lo hiciera la pasada edición con Francia, este año Escena Contemporánea se centra en la producción contemporánea de Portugal a través del Ciclo autor que dedica una retrospectiva del autor, director, actor y bailarín Paulo Castro. Así Castro viaja hasta Madrid con tres propuestas escénicas, las obras teatrales Wake up-Hate y Nighting-gale in the Catholic Church y la performance B-File montajes todos ellos en los que la política y la violencia son los temas predominantes a través del estilo corrosivo que caracteriza a su creador.
En lo que al Ciclo Autor se refiere, este año esta dedicado a Heiner Müller bajo la denominación “El teatro como poética de revolución” un ciclo en el que además de mesas redondas y diversas conferencias que tienen por objetivo ahondar en la vida y obra del autor alemán se completa con la puesta en escena de algunas de sus obras más características como La Máquinahamlet, a cargo de Teatro de la Esquirla, Camino de Wolokolamsk, por Metatarso Producciones o Cuarteto con puesta en escena de los alumnos de la RESAD. El Ciclo Música por su parte se va a centrar en esta ocasión sen la creación contemporánea procedente de Japón.
Otras experiencias
El Festival se completa con el Ciclo Experiencias que se propone ofrecer las propuestas menos encasilladas y más interdisciplinares de la creación contemporánea por lo que predominan las performances y las instalaciones más vanguardistas.
En este ciclo se integra la colaboración del festival con ARCO donde se mostrarán las instalaciones de Kira O´Reilly, AVIÓN, y la del colectivo No me Compliques la Vida que presentará Gizon Galdua 1 en el antimuseo de arte contemporáneo entre otros. Esta extensión del festival tiene por objeto abrir los acontecimientos escénicos a diferentes plataformas de representación, buscando nuevas ubicaciones para los montajes y llegar así a los espectadores desde diferentes espacios. A su vez Escena Contemporánea, y con el objeto de ser una plataforma para las compañías madrileñas, ha organizado el 1er. Encuentro de Programadores por lo que del 13 al 17 de febrero, se mostrarán los trabajos más destacados en la pasada temporada teatral presentados en Madrid.
Y en un festival de estas características no podía faltar la parte formativa que llega a través del taller ”El Actor Pshycophone” un trabajo a partir de la obra Pentesilea a cargo de Philippe Asselin y Nathalie Le Corre que tendrá lugar en La Casa Encendida.
