Buen viaje
Producciones Che y Moche presentó el pasado jueves en el Teatro Principal, con una considerable presencia de público que respondió con prolongados aplausos, ‘Los músicos del Titanic’, un espectáculo que aúna con coherencia y en clave de humor, la música y el teatro para ofrecer una divertida visión de la travesía del mítico trasatlántico y las peripecias de sus músicos que, según se cuenta, continuaron tocando mientras el gigantesco barco se hundía en las heladas aguas del Atlántico Norte. No es esta la primera vez que este encuentro entre teatro y música está presente en las propuestas que firma Che y Moche.
Recordemos su espléndido ‘Oua Umplute’, donde consiguen crear una comunión festiva y auténtica con los espectadores. Aunque ‘Los músicos del Titanic’ no está a esa altura de complicidad entre el escenario y sala, sí logra conectar y conseguir su objetivo de divertir y hacer reír al público. El espectáculo está bien construido y se desarrolla con un buen ritmo. En ocasiones recuerda esas antiguas películas de cine cómico por la forma en que construyen las situaciones, sus hilarantes equívocos o su disparatado juego de entradas y salidas. Tal vez alguna de las escenas se prolongue innecesariamente, pero hay dos momentos memorables: la escena del cocinero y la escena final, mientras tocan la Barcarola de ‘Los cuentos de Hoffman’.
La escenografía (ingenioso ese camarote que va transformándose en los diferentes lugares en los que se desarrolla la acción) sencilla y altamente funcional, juega un papel fundamental en ese buen ritmo que acompaña el desarrollo narrativo y en la estructuración del discurso escénico. Crea con facilidad los diferentes espacios y sirve de forma activa al dinámico juego teatral que propone la puesta en escena. El trabajo interpretativo es correcto y convincente (notable Carlos Alcolea) y está planteado con una comicidad intencionadamente exagerada, en coherencia con el aire clownesco que preside la concepción del espectáculo. En definitiva una propuesta divertida, fresca y desenfadada, que conecta con el espectador de manera directa y divertida.
Obra: Los músicos del Titanic Compañía: Producciones Che y Moche. Intérpretes: Carlos Alcolea, Jorge Marco, Kike Lera, Joaquín Murillo y Roberto Carlos Pérez. Escenografía: Joaquín Murillo y Manolo Pellicer. Vestuario: Josefina Graus. Iluminación: Nacho Gómez y Tatoño. Arreglos y dirección musical: Teresa Polyvka. Dirección: Joaquín Murillo. Lugar: Teatro Principal de Zaragoza. Fecha: 5 de mayo de 2011
Joaquín Melguizo
Publicado en Heraldo de Aragón 8 de mayo de 2011
