La Fundación Autor publica ‘…Y la palabra se hizo música’, de Fernando González Lucini. El libro recorre la historia de la canción de autor en el estado y dedica un importante capítulo a la música vasca. La canción de autor es una historia de honestidades, de sentimientos y de sueños de libertad protagonizada por centenares de hombres y de mujeres que con su palabra y su música mantuvieron vivos y vociferantes a varias generaciones en una época de silencios.
Ahora que se cumple su 50º aniversario, llega el momento de echar la vista atrás para observar desde la distancia el poso que ha dejado la canción de tinte social en la cultura popular. Por eso, coincidiendo con esa efeméride, la Fundación Autor ha editado el libro …Y la palabra se hizo música. La canción de autor en España, de Fernando González Lucini, cuya presentación en Donostia tuvo lugar en el Centro Cultural Okendo.
A lo largo de dos ejemplares, cuidadosamente editados, González Lucini repasa con esmero la evolución de aquellos cantautores y grupos que, como renovados trovadores o juglares, sacaron la poesía a la calle con el fin de que la gente pudiera disponer de ella.
González Lucini parte del comienzo de esta manifestación musical cuando el cantautor Paco Ibáñez, en 1956, exiliado entonces en París, decidió tomar su guitarra para ponerle música al poema La más bella niña, de Luis de Góngora. Este hecho, junto con la publicación, un año antes, de los libros Pido la paz y la palabra, de Blas de Otero, y de Cantos iberos, de Gabriel Celaya, supusieron el inicio de la canción de autor en el estado español. Así, a través de los pioneros Paco Ibáñez y, posteriormente, el cantautor catalán Raimon, la palabra poética se haría música.
A partir de aquí, Lucini revisa, a lo largo de más de 1.000 páginas, cincuenta años con declaraciones de los protagonistas, biografías, poemas, discos y canciones bajo la atenta mirada del propio autor, que vivió en primera persona muchos de los acontecimientos.
La nueva canción vasca
El autor ahonda en la nueva canción vasca, explicando las causas de su nacimiento y enfatizando en sus trovadores: Michel Labeguerie, Julen Lekuona, Mikel Laboa, Benito Lertxundi, la fundación del colectivo Ez Dok Amairu, Oskorri, Ruper Ordorika, Fermín Muguruza… Y es que en su opinión, “la canción de autor se asocia siempre a un momento concreto del franquismo y la transición pero en realidad ha existido siempre y aún permanece”. Lucini recuerda una vieja frase de Aita Donostia: “El pueblo vasco siempre ha cantado”. El autor añade que, “Euskadi goza de una gran tradición de música popular que se ha transmitido de generación en generación. La nueva canción vasca también se inspiró en esa tradición de cancioneros pero aportando un notable enriquecimiento a nivel musical, sin dejar de lado las reividicaciones poéticas, sociales y políticas”.
Nota sobre el autor
Fermando González Lucini es maestro nacional y licenciado en Pedagogía. De 1980 a 1989 impartió, en ESCUNI -Escuela de Formación del Profesorado, de Madrid- una asignatura sobre música popular y canción de autor, titulada Música, canción y pedadogía. Ha sido director durante seis años de los programas de radio Las voces de la música, de Antena 3; Donde la palabra se hace música y La isla del hombre libre (segunda etapa), del Círculo de Bellas Artes de Madrid.
Fue fundador y vicepresidente de la Asociación para la Música Popular. Ha sido creador y comisario de las exposiciones Arte y canción, en la sala Juana Mordó del Círculo de Bellas Artes; Cantemos como quien respira, en la Casa de los Morlanes del Ayuntamiento de Zaragoza; Arte y Canción II, en la sala Vincorsa del Ayuntamiento de Córdoba, y ¡Volad, canciones, volad!, exposición itinerante de la Fundación Autor inaugurada este mismo año en la Biblioteca Nacional de Madrid y que en estos momentos acoge el Centro Cultural Okendo de Donostia.
